Mi hermano

Creo que apenas tenía cuatro años cuando mi hermano pequeño nació. Yo me quedé en casa de mis abuelos y recuerdo que le pregunté a mi abuela si, a partir de ese día me quedaría a vivir con ellos. Mi abuela sonrió y me dijo que no, que sólo hasta que mi madre saliera del hospital. Yo tenía ganas de ver a mi hermano pues no sabía cono sería. Fui a la Clínica Fábregas, de Reus a verle. Era muy pequeño y estaba dormido. Luego se despertó y me dejaron cogerlo. Tenía mucho pelo, de color negro fuerte, su cara era redonda y sus dedos eran muy pequeños y arrugados. De repente abrió sus ojos, también de color muy oscuro y me miró. Tuve una sorpresa, parecía que me estaba mirando fijamente sólo a mi. No tenía pestañas pero sus ojos me parecieron muy grandes.
Mi madre me dijo – Marc creo que tu hermano tenía muchas ganas de conocerte también… -
Fueron unos días extraños, estaba contento porque tenía un hermano (yo quería que fuese un chico) pero estaba nervioso porque no sabía cuando volvería a mi casa ni que pasaría luego.
Una semana después regresamos todos a casa y yo en el colegio Pare Manyanet estaba muy bien pues todos me preguntaban por él. Y me regalaron una tarjeta, un cochecito y un lápiz para él.
Con el tiempo ha ido creciendo y ahora somos buenos amigos aunque nos peleamos mucho pero me gusta jugar con él a los juegos de la Play como Call of Duty, PES 2011. Reconozco que, aunque a veces me las cargo por su culpa y eso me enfada mucho también tenemos algunos momentos que nos juntamos.
No es el mejor hermano del mundo pero es mi hermano.