La venganza es un plato que se sirve entre rejas.

Todo estaba listo, y decididamente no iba a fallar. No ahora.

Como homenaje sarcástico a su objetivo César, escribió y especificó todo su plan en un cuaderno con tapas de hule. Todas y cada una de las páginas estaban numeradas con indicaciones que te llevaban de unas páginas a otras para especificar.

Fue algo largo y complicado, pero la primera fase de su plan era escribir una especie de libro perfectamente detallado, con todos los sucesos que pasaron desde el día del concurso en Zaragoza, hasta el día de la huída de Mario de la casa en las montañas.

Teniendo en cuenta que fue subcampeona del concurso y causó tanta sensación, los entendidos y no tan entendidos del ballet, estuvieron intrigados por saber de qué trataba un libro escrito por una persona como ella, por lo tanto tuvo más fama de lo que esperaba Elisa.

Y claro, el mejor método de hacerse oír, son los medios de comunicación, y como mejor medio de comunicación en este momento, tenemos la televisión.

Cientos de miles de personas vieron por su monitor las declaraciones de Elisa a preguntas como: ¿Este libro está basado en hechos reales? ¿En quién se inspiran los personajes? ¿Qué hizo la policía? ¿Los pillaron?

Muchas de esas preguntas fueron imposibles de contestar para Elisa, pero con una gran entereza las contestó y por la veracidad de sus palabras, esa historia fue llevada a juicio mayor.

Mario y César aunque parezca increíble, fueron encontrados y encarcelados de inmediato; uno por asesinato indirecto y el otro por extracción de bienes impropios (el cuaderno).

No era la venganza que esperaba, pero ninguno de ellos volvería a hacer daño a nadie.

Jamás.